Zumba, día 13

Hoy nos ha dado clase otro profe porque La Diosa, como sabéis, se ha cogido el día libre. Como me temía, El Otro ha venido con sus propias coreografías y no he dado pie con bola. Pero yo y todas. Ha habido momentos en que la clase ha sido una fiesta de manotazos. No os podéis imaginar lo que he disfrutado viendo a la tribu del ojo pintado pisarse entre sí. Ha sido hermoso, democrático. El Otro era un chico encantador. Daban ganas de llevártelo a casa, darle un beso en la frente y taparlo en el sofá con una manta, pero esta relación no va a ninguna parte: no me ha hecho sudar. El regueton no le va. Nos ha puesto temas de Adele. Es tan delicado que antes de cada canción nos explicaba lo que nos iba a hacer. Sobre todo, nos ha enseñado a interpretar las letras, es decir, a abrazarnos a nosotras mismas, a secarnos las lágrimas, a hacer como que a lo lejos, con una mano sobre los ojos para defendernos del sol, creíamos ver al hombre de nuestra vida y corríamos hacia él… Después, un par de saltitos, un par de giros, una serie de aspavientos extraños con los brazos -aquí era cuando venían los manotazos…-, pero ni movimientos obscenos, ni patadas, ni sentadillas, ni abdominales. El mejor momento ha sido cuando ha puesto, seguidas, dos canciones de Grease y nos hemos vuelto locas -sobre todo él-. Sí, nos ha hecho reír, pero no nos ha hecho sudar. Y para un día bien, pero nosotras pagamos por perrear.  

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s